(La Nueva España)

ÁLVARO MUÑIZ | Director de la Feria de Muestras

"No sólo le ha ido bien al sector del automóvil, les ha ido bien a todos"

C. JIMÉNEZ Álvaro Muñiz Suárez (Gijón, 1953), director de la Feria de Muestras de Asturias y presidente del Ateneo Jovellanos y del Club de Empresas de Turismo de Negocios, afirma vivir todos los agostos a la orilla del Piles.

-Usted aseguró que este año no habían vendido la feria, que se la habían comprado. ¿Tan buena ha sido?

-Hemos tenido más gente que el año pasado pero no tanto como se cree. Al final, esto es una cuestión de sensaciones. El mundo se mueve por sensaciones, y cuando los mismos están más alegres abultan por dos.

-¿Y en lo económico?

-Tenemos la tendencia de hablar de la Feria como una feria de transacciones y la Feria es algo más que transacciones.

-¿Ustedes están satisfechos?

-Como organización puedo decir que hay una sensación de satisfacción generalizada, lógica. No es para que nos emborrachemos de éxito pero lo que sí constatamos una vez más es que la Feria es un instrumento vivo. Y cuando dije que nos la han comprado no es marketing; obedece a una sensación.

-¿Cuál es esa sensación?

-Que la gente está más tranquila, más contenta, te sonríe, es menos agresiva y ves menos problemas. Eso se debe a una panorámica de satisfacción general, independientemente de que quien tiene que valorar son expositores y visitantes.

-¿El sector del automóvil es el termómetro de que ya se atisban signos de recuperación?

-Aquí no solo le ha ido bien al sector del automóvil, le ha ido bien a todos los sectores. Indudablemente que el del automóvil se está recuperando, pero eso no solo lo ha demostrado la Feria. Aunque hay mucha gente que está esperando esa oferta especial que tiene cuando se viene a la feria, esa circunstancia de la recuperación la veíamos ya en los meses anteriores.
-Más evidencias....

-La siguiente satisfacción es que abres las puertas de la Feria y piensas cómo se va a comportar la gente en el período en el que estamos, pero que hay más alegría, eso es una realidad. A pesar de haber empezado muy pronto (el 2 de agosto) la experiencia me dice que la primera semana podía haber sido más débil, pero este año desde el principio ya notabas que iba bien; creo que estamos en un buen momento.

-Algunos expositores afirman que las transacciones comerciales han crecido.

-En Asturias un expositor de Murcia que vende a un señor de Cuenca no le deja un duro a la región. Lo que le deja es la parte de turismo de negocios, su estancia, los servicios que recaba... así es como evaluamos la repercusión de la feria. Y a la gente le apetece estar aquí por la repercusión que tiene de imagen, por el valor añadido que va creando... Por eso digo que hay que protegerla más y no quedarnos en si vendimos tres bocadillos o cuatro coches.

-¿Asturias valora su feria?

-No hay nada mejor que los sabios dichos populares: nadie es profeta en su tierra. Se valora menos que lo que lo valoran los de fuera. Lo que tenemos en la mano es una oportunidad de mimarla, cuidarla y mantenerla.

-El homenaje a Luis Adaro, ¿fue un acto de justicia?

-Absolutamente. Él no diseñó una feria en agosto. La feria le vino porque el Ministerio dijo que el calendario español estaba saturado y solo quedaba agosto. Aquello era como ir a vender helados a la playa de San Lorenzo el 13 de diciembre y Luis Adaro dijo: "¡adelante!". Aquello que arrancó como una debilidad acabó siendo una fortaleza. Él fue quien incitó a que esto existiera; tiene el valor del germen.

-Cierra la feria de 2014, ¿ya están pensando en 2015?

-Sí, pero no solo en 2015, sino en las cinco siguientes. Hay muchos proyectos que se pudieron llevar a cabo este año, como las adecuaciones de parcelas que había pero hay otras propuestas que dependen de otras voluntades.

-A nivel institucional, ¿echan en falta a alguien?

-Yo siempre he dicho que asistir a la feria no es una obligación y cada uno elige sus caminos pero me encantaría, por ejemplo, que estuviese el Ayuntamiento de Oviedo, siendo esta la Feria de Asturias aunque muchas veces diga que es la feria de Gijón. Entiendo que tiene que estar con una presencia especial al ser la capital y eso requiere un esfuerzo que, a lo mejor, en este momento, no parece el más apropiado. Sé que están en buena disposición porque así lo han manifestado y porque se les nota pero a lo mejor tienen otras preferencias.

-Hay quien la sigue identificando como la feria del bocata.

-Si esto hubiera sido la feria del bocadillo hubiera acabado mucho antes. No se puede mantener una feria del bocadillo en esta situación años y años. Aún así detrás de cada bocadillo hay una industria que busca vender cada vez más. Al final eso es lo que subyace y lo que la mantiene.

-"La feria es lo que es y no hace falta cambiarla", se dijo en alguna ocasión...

-No es cuestión de cambiar o no cambiar. Las ferias nacieron en la alta Edad Media y lo que no podemos cambiar es la esencia, pero sí actualizarla y adecuarla a las necesidades del momento. Esto no es un parque temático; es una feria única en el mundo.