Noticias / El letrado Eladio de la Concha (p. 1976). entrevistado desde su posición como presidente del Rotary
Esta Noticia fue editada el: 13-11-2011

El letrado Eladio de la Concha (p. 1976). entrevistado desde su posición como presidente del Rotary  max-width=

La Nueva España. Se define como un gijonés de buen talante, siempre deportista, políticamente de derechas, con enorme sentido del humor, consciente del valor del trabajo y algo tímido y retraído. El sexto de una familia numerosa de trece hermanos, hijo del doctor Eladio de la Concha, pese a llevar el nombre del progenitor no pudo heredar «la placa», como aventuraba su padre, porque no cogió la senda de la medicina y sí la del derecho. Abogado en ejercicio desde hace veinticinco años, además preside el Rotary Club.

Es una personalidad que no se nos escapa. Por cercanía, popularidad, incluso atractivo personal. En estos momentos preside el Rotary Club, entidad que está a punto de celebrar la cena anual encaminada a obtener fondos para sus proyectos humanitarios. Así que aquí lo tenemos, aunque en cualquier otra ocasión hubiera ofrecido idéntico interés; su categoría humana excede de las circunstancias. Es ameno, culto, comunicativo... muy buena gente.

-Por favor, defínase.

-Soy un gijonés de nacimiento (1959) y devoción. Sexto de trece hermanos. Esto presupone que en una familia tan numerosa no te regalan nada, así que hube de luchar para abrirme camino. Hice el Bachiller con los Jesuitas y, tras una temporada en Inglaterra, cursé Derecho en Oviedo. Profesión que llevo veinticinco años ejerciendo en Gijón.

-¿Dónde vive?

-En Somió toda la vida, aunque ahora en una zona distinta de la de mis padres.

-¿De pequeño qué quería ser?

-Médico, no. Pese a la voluntad de mi padre, «al llamarte como yo -decía- podrás heredar hasta la placa». Estuve indeciso, lo que más me interesaba eran los deportes.

-¿Cuándo se produjo su encuentro con el Rotary?

-Aproximadamente a finales de 2004, por medio de algunos amigos. Me gustó la gente que participaba, me atrajeron sus reuniones, las charlas, a las que acudían personas muy interesantes. Y sobre todo la cuestión solidaria.

-¿Le gusta ostentar hoy la presidencia?

-La acepto porque me ha correspondido. Es un año en el que tienes oportunidad de hacer todo lo que puedes. Anteriormente fui macero.

-En un sentido general, ¿prefiere mandar u obedecer?

-Soy persona disciplinada, por tanto sé cuándo tengo que acatar órdenes; pero si le digo la verdad, las veces que tuve que mandar creo que lo hice bien.

-El próximo sábado, en el Real Club de Regatas, el Rotary convoca a su cena anual. ¿A qué proyecto se dirigen sus beneficios?

-A la Sociedad Alarde, que trabaja con disminuidos psíquicos, en Gijón. Tiene su sede en La Calzada. Aparte, en la vía internacional, estamos trabajando dentro del distrito 2201, que engloba los clubes de rotarios de Galicia, Madrid, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura, Canarias y Asturias, para construir un hospital en Haití. Aparte, erradicar la polio en el mundo es el proyecto continuo del Rotary internacional. El año pasado, Bill Gates donó 30 millones de dólares para tal fin, y sigue colaborando. -¿El Rotary le ha servio para acallar sus inquietudes sociales?

-Es compatible con ellas, pero no puede llenarlas todas. Un hombre sin inquietudes es como si se le acabara la vida.

-Atravesamos momentos difíciles. ¿Piensa que cualquier tiempo pasado fue mejor?

-No, todo lo contrario. El hombre ha evolucionado de un modo espectacular, lo que no lo libra de tropiezos. Las condiciones de vida actuales son como un sueño. Andamos despistados en el terreno de los valores, pero éstos son recuperables.

-Tiene usted aspecto de hombre serio, ¿es sólo fachada?

-Es cierto que a veces me lo dicen y he empezado a preocuparme porque creo tener mucho sentido del humor; me pondría la máxima nota en humor.

-¿A quién admira?

-Nunca he tenido ídolos. E ir a los tópicos tampoco me gusta. Pero como deportista y como persona creo que Quini es admirable. Actualmente vive un trance difícil, pero lo está superando de modo ejemplar.

-¿Qué añadiría a su personalidad? Alto y guapo ya es...

-Gracias por eso último. Saber venderme mejor a mí mismo es algo que me gustaría; siempre he sido un podo tímido, retraído... Es un lastre que poco a poco voy superando.

-¿Por dónde se inclinan sus pasiones?

-Por mi familia, por mis amigos, aunque suene recurrente. Disfruto de las tertulias. El deporte sigue siendo una de mis aficiones; aún practico fútbol sala. Jugué al rugby en ligas nacionales durante diecisiete años, hasta que me rompí una rodilla. Y soy socio del Sporting desde 1969.

-¿Y su ideología política?

-Siempre estuve en la derecha. En el 2000, cuando gobernaba José María Aznar, me afilié al PP, aunque nunca he tenido puesto alguno. El año pasado me di de baja y ahora milito en Foro Asturias.

-¿Qué sobra en esta sociedad, según su criterio?

-Howard Gardner, uno de los premios «Príncipe de Asturias» de este año, dijo que si queremos seguir manteniendo a tantos millonarios y tantas guerras, tal vez mañana no tengamos dinero para pagar la factura de la escuela. Yo eliminaría a los especuladores que se están llevando el trabajo de todos. El mundo se tiene que replantear una forma distinta de distribución de la riqueza. Y un modo de valorar las tareas humanas que son realmente importantes.

-¿Es usted alarmista?

-No, pero tengo la impresión de que en este momento interesa crear temor en las grandes masas para seguir haciendo negocio. En esta crisis los beneficiarios son los de siempre, y las grandes fortunas siguen incrementando el patrimonio, mientras las clases medias tiemblan y pierden sus ahorros.

-¿El «caso Urdangarín» supone un misil en el flanco de la monarquía?

-Los monárquicos auténticos deben de estar muy afectados con la actual generación de la Casa Real. Por mi parte, creo en un sistema presidencialista, al estilo de EE UU, en el que la misma persona ostenta la Presidencia y el Gobierno. Esto nos ahorraría muchos sueldos y muchas confrontaciones.

-Dentro de una semana elecciones, ¿cómo lo ve?

-Reflexionaremos cenando; y en cuanto al resultado, creo que ganará por una amplia mayoría el PP. Y espero que Foro obtenga unos buenos resultados, para que Asturias tenga una clara voz en las cámaras.

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