Noticias / Entrevista a Francisco Javier de la Calle (p.2011)
Ha recibido el premio de investigación "Alan Turing" del Colegio Oficial de Ingenieros Informáticos del Principado de Asturias
Esta Noticia fue editada el: 17-04-2019

Entrevista a Francisco Javier de la Calle (p.2011) max-width=

(La Nueva España)

FRANCISCO JAVIER DE LA CALLE | Informático y docente en la Politécnica

"Los informáticos que se van a trabajar a Alemania consiguen sueldos mejores"

"La investigación de ingenierías en España no está demasiado valorada; las inversiones se centran en el campo de la medicina y la farmacia"

S. F. L. - En un sector en el que se ha tomado por norma buscar trabajo fuera de España y renunciar a la docencia y a la investigación como posibles salidas laborales, el gijonés Francisco Javier de la Calle Herrera (Gijón, 1993) ha conseguido llevarle la contraria al sistema. El informático, docente desde hace meses en la Escuela Politécnica de Gijón (donde cursó el grado y el máster de su especialidad), se hizo hace unos días con el premio de investigación "Alan Turing" del Colegio Oficial de Ingenieros Informáticos del Principado de Asturias. Reconoce, eso sí, que sus colegas de oficio lo tienen todavía complicado para trabajar "con buenas condiciones" en su país, sobre todo, porque considera que la rama de la informática sigue sin estar del todo valorada en comparación al resto de las ingenierías. Su trabajo premiado, bajo el título de "Sistema de visión por computador para la inspección superficial de carril ferroviario", ideó un nueva forma de inspeccionar la seguridad de estos carriles con un novedoso sistema de luces y fotografías.

- ¿Podemos resumir sin demasiados tecnicismos en qué consiste su nuevo sistema?

-Partimos de la idea de que en una factoría se produce en serie el carril ferroviario que, una vez terminado, debe pasar por una línea de inspección. El trabajo propone que mientras el material pasa por esa línea nosotros, con un sistema de luces, una roja y otra azul, sacamos fotos a los carriles. Si vemos que en esas imágenes hay un cambio brusco de la intensidad de las luces, por lo general, significa que en la superficie hay algún tipo de irregularidad. Es decir, que al sacar fotos con esas luces podemos detectar alguna subida o bajada brusca, y eso significa que la pieza tienen algún defecto y que, por lo general, no puede salir de la fábrica. El sistema viene a ser una forma más de control de calidad y de descarte automático de piezas defectuosas, simplemente.

- ¿Y se logró aplicar?

-Sí, desde hace un par de años se utiliza en Arcelor-Mittal.

- ¿Cómo surgió la idea de investigar sobre esto?

-Vino a petición de la propia empresa. Por entonces nos dijeron que estaban utilizando un sistema comercial que no les estaba dando los resultados que ellos querían y nos pidieron un modelo alternativo para controlar posibles defectos.

- Pero fue un trabajo universitario.

-Sí, fue mi trabajo Fin de Máster aquí en la Politécnica. Lo acabé hace dos años y al poco tiempo ya lo implantaron.

- ¿Y ahora a qué se dedica?

-Yo estoy trabajando como docente en la misma escuela. Hice el grado de Informática aquí y también el Máster en Ingeniería Informática. Cuando aún me estaba formando me ofrecieron la posibilidad de quedarme y así lo hice.

- No es la salida profesional en la mente de cualquier alumno.

-Ya, yo tampoco me lo había planteado. En general la rama de la informática recibe a alumnos que no tienen mucha idea de dónde se están metiendo. Orienté mis estudios hacia la docencia cuando estaba haciendo el máster porque vi que era una de las pocas salidas laborales que me interesaban aquí en Asturias.

- ¿Es más fácil prosperar profesionalmente fuera de la región?

-Y fuera de España. Tengo a muchos compañeros que se están buscando la vida por todo el mundo. Si quieres un trabajo de calidad y buen sueldo los más probable es que al menos tengas que irte de Asturias. Mi impresión es que es un sector que no se acaba de valorar. Dentro de las ingenierías, yo creo que es la que menos se valora profesionalmente.

- ¿No se plantea irse fuera?

-Yo aquí estoy bien, pero también sé que podría ganar más si me fuese. Al final a mí siempre me gustó dar clase, aunque no me lo había planteado en serio, y ahora estoy contento con lo que tengo. Pero, insisto, muchos de mis compañeros sí que han tenido que irse fuera.

- ¿Por qué decía antes que su rama recibe a alumnos que no tienen mucha idea de en qué consiste?

-Porque al fin y al cabo esto es una ingeniería y es dura, como todas. A veces parece que la gente se mete en la carrera con la idea de dedicarse a desarrollar videojuegos y no siempre es posible. Yo creo que si buscas trabajo lo vas a encontrar, pero parece que las ofertas no siempre gustan a los graduados porque no es lo que se imaginaban al principio. Y luego está claro que si te vas fuera lo normal es que te vaya a ir mejor.

- ¿Y la investigación?

-Es una parte muy importante de las ingenierías y en España tampoco está muy bien valorada, también por eso mucha gente se marcha del país. Da la sensación de que aquí se apuesta por la investigación en medicina, farmacia y poco más. Que eso está muy bien, claro, pero se podría abrir el abanico. Promover que los ingenieros investiguen parece una decisión muy obvia, pero aquí no abunda. Fuera sí se valora y muchos hacen carrera de ello.

- ¿Hay algún país que nos lleve especial ventaja?

-Alemania, sin duda. Hay muchísimos ingenieros, de todas las ramas, trabajando allí. Tienen mejores condiciones laborales y se promueve más su carrera como investigadores. Ahí vamos un poco a la cola.

Foto Angel